¿Cómo y dónde te imaginas cuando tengas veintiún años?

En realidad yo no me imagino cuando tenga veintiún años, no soy capaz de verme, de imaginarme en el futuro. Pero lo e intentado, e ideado mi plan de futuro, cómo me gustaría estar y ser cuando tenga esa edad. 
Me imagino estudiando en la universidad, haciéndome una buena carrera de provecho. Me gustaría estudiar en la universidad de Jaén, y así puedo estar lo más cerca posible de mi familia, que vive en Quesada, aunque mis tíos están en Baeza y en Castellón. Pero antes me hubiera buscado un trabajillo de camarera o así para ganar algún dinero extra. Aunque todavía no sé cuál me gustaría que fuera mi vocación, me atraen muchos temas para estudiar: la astronomía, la biología, el mundo de las pasarelas (o sea sé: ser modelo), también me gustaría mucho ser bailarina, fotógrafa... ¡Hay tantos trabajos en los que elegir! Pero a mí me gustaría tener un trabajo importante, de provecho. Sabría como mínimo dos idiomas, porque para trabajar te exigen saber eso. Uno de ellos sería el francés, porque este idioma me encanta, aunque todavía no lo he aprendido, pero sé algunas frasecillas. También me echaría un novio, y saldríamos de fiesta cuando haya hecho mis cosas y tenga todas mis tareas acabadas, porque si no me aburriría con tanto trabajo. También, como me habría sacado el carnet de conducir, viajaría con mis amigas aquí y allá, a Madrid, a Sevilla, a Almería, a Francia... Y nos echaríamos fotos para recordar esos momentos. Los fines de semana los aprovecharía para visitar a mi familia. 
Y esto es todo mi plan de futuro, aunque no sé si se cumplirá. ¡Nadie sabe su verdadero futuro!